Peñarol subió un escalón en su nivel de juego, pero el apagón dejó todo por la mitad

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Cuando el equipo había elevado su nivel, dominaba y generaba las mejores situaciones de peligro, en el cierre de la primera parte las luces del Estadio Centenario se apagaron y luego de una hora y cuarto de espera, el partido entre Peñarol y Rentistas se suspendió.

Eso determina que ahora la Mesa Ejecutiva de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) tenga que solicitarle al Consejo de Liga que apruebe en esta jornada la disputa de los 46 minutos que restan el próximo martes 26 de julio.

Todo hace indicar que no habrá inconveniente para que el aurinegro y el Bicho Colorado culminen su partido ya que tampoco tienen chances de avanzar a la final del Torneo Intermedio.

El fútbol

Desde el inicio de este medio partido, el equipo de Mauricio Larriera logró plasmar una gran superioridad sobre Rentistas, subiendo un escalón respecto a lo que venía mostrando en sus anteriores presentaciones. Por cómo se estaba dando el trámite, todo hacía indicar que el mirasol estaba en condiciones de cortar la racha de tres encuentros sin triunfos en el Campeonato Uruguayo.

Con Ignacio Laquintana muy picante, tanto por la derecha como por izquierda, con la movilidad de Nicolás Rossi, las subidas de Matías Aguirregaray y los buenos pases de Pablo Ceppelini se sumaban al despliegue de Damián Musto y Agustín Álvarez Wallace para que el mirasol se plantara decididamente en campo rival para lastimar a Rentistas.

Fue así que se comenzaron a gestar varias jugadas de peligro. La primera clara fue a los 13’, cuando Laquintana pisó el área por izquierda y habilitó a Ruben Bentancourt, quien no pudo definir bien de frente al arco porque lo derribaron. Era penal, pero los árbitros cobraron offside previo de Nacho y todo quedó invalidado.

El aurinegro siguió atacando. Llegaron más jugadas de peligro y en las de más claridad el protagonista se repetía: Ignacio Laquinana. Pero nuevamente hubo un factor clave que le impidió a Peñarol ponerse en ventaja: la definición.

Laquintana hizo muchas cosas bien. Encaró, gambeteó, ganó en velocidad y pisó el área, pero a la hora de definir no estuvo fino. Primero porque hubo un par de atajadas de Sebastián Fuentes y otra que terminó con un disparo en el palo.

Con el apagón todo quedó por la mitad. Peñarol no logró concretar sus chances y el partido se suspendió. Ahora habrá que esperar al martes para que se complete.