Mujer policía baleó un hombre, le dejó lesiones de por vida y fiscal pide pena de 10 años

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Julia (nombre ficticio) hace 10 años que es policía. Trabajó en Narcóticos y dice nunca haber tenido un problema de “gatillo fácil”.

No obstante, Julia hoy es acusada por las fiscales de Libertad, Bettina Ramos y Judith Rodríguez, de incurrir en ilícitos como lesiones gravísimas, simulación de delito y reiterados delitos de violencia privada. La Fiscalía la acusa de disparar seis tiros a un hombre conocido como “El Feo” y dejarle múltiples daños en su organismo, alguno de ellos de por vida.

A partir del lunes 24 se desarrolla el juicio penal donde el juez de Libertad, Javier Machado, escucha los testimonios de varios testigos.

En su acusación, la Fiscalía pide una pena de cárcel para la funcionaria policial de 10 años. Su abogado, Alberto Rojas, alega que se trató de un caso de legítima defensa, ya que la agente era acosada por integrantes de una banda narco para que abandonara su vivienda.

Hace unos cuatro años, Julia compró una pequeña casa en el barrio “Parque Postel” en Ciudad del Plata y la reformó.

Según cuenta la funcionaria policial, en poco tiempo el lugar en que vive se llenó de “bocas de drogas”. Frente a donde vivía Julia, según dice, hay un campo que era utilizado por los dueños de una de ellas para esconder armas y estupefacientes. “Como soy policía, le molestaba a los traficantes”, relató la agente. Con el correr del tiempo, los delincuentes comenzaron a amenazar a los vecinos, dice. Y agrega que por lo menos ocho de ellos malvendieron sus viviendas y se fueron.

La agente, sin embargo, sostiene que decidió quedarse. “A mí me faltaba cuatro o cinco años para terminar mi crédito. No podía irme. Entonces (los narcos) comenzaron a hacerme la vida imposible”, dijo la funcionaria policial.

Añadió que empezó a sufrir amenazas cuando salía o llegaba del trabajo. Al principio, explicó, “un hombre -conocido como ‘El Feo’- con antecedentes penales, empezó a hacerme la vida imposible”, afirmó.

En enero de ese año, la policía lo denunció por hurtos de cables. Al salir o al llegar del trabajo, la agente trataba de evitarlo. Pero según relata, el hostigamiento era permanente y duró varios meses.

En enero de 2021, el individuo la habría amenazado con un arma blanca. Al ver que la policía estaba dispuesta a repeler el ataque, el hombre huyó corriendo por los patios de dos casas, contó la funcionaria.

El 27 de febrero de 2021, otra vez el hombre habría interceptado a la mujer policía al frente de su casa. “El venía insultándome desde hacía un rato. Sacó un arma y me apuntó. Yo le tiré seis tiros -la Fiscalía dice que fueron siete-. Le impacté todos. Él siempre me estuvo apuntando. Por eso, realicé la cantidad de disparos que hice”, explicó Julia.

El hombre cayó malherido. Luego, llamó a la Policía. Sin embargo, los familiares del herido llegaron antes que el patrullero.

La Fiscalía señala que, en enero de 2021, contrató a la víctima con el propósito de que este realizara la limpieza de un terreno propiedad de la policía. Luego del trabajo, la funcionaria le reprochó al “Feo” que se había llevado como parte de los residuos unos cables de su propiedad. A partir de ahí, dice la Fiscalía, la imputada quedó enfrentada a la víctima.

Poco después de la limpieza del terreno, Julia se habría encontrado con “El Feo” en la calle cuando éste pedía monedas. “Al verlo, la agente le manifestó que se fuera del lugar porque lo iba a matar a balazos”, señala la acusación fiscal.

Poco después, Julia habría encontrado cerca de su casa al hombre.

“La funcionaria tomó a golpes de puño a la víctima mientras dos hombres descendieron de un vehículo y sujetaron al hombre por detrás, quien logró huir”, dice las fiscales. Varios días después, los vecinos escucharon los tiros en el barrio.

Luego consultaron al “Feo” y éste respondió que la agente policial “lo había amenazado” y que le “había efectuado varios disparos” con su arma de reglamento, sin lograr lastimarlo.

Luego se suscitó el incidente donde la víctima resultó herido de múltiples disparos.

“El Feo” no llevó consigo ningún arma de fuego, sostiene la Fiscalía. Sin embargo, un arma fue encontrada en el lugar al lado del hombre, por lo cual se presume que la policía la “plantó” allí. “Esa información fue aportada por testigos”, añadió.

El informe pericial consignó que el hombre recibió disparos en la zona abdominal que le impactaron en los muslos, pene y en zonas lumbares derecha e izquierda.

La acusación fiscal sostiene que, debido a las lesiones sufridas, la víctima debió ser intervenida quirúrgicamente para extirparle el riñón derecho. Y agrega que los daños causados por proyectiles le produjeron pérdida de control de esfínteres anal y vesical, así como también la incapacidad de caminar. “El miembro inferior derecho tiene pérdida funcional total”, señala el perito forense.

Y concluyó que la pérdida de control vesical le afectó a la víctima la sensibilidad a nivel genital, “lo que imposibilita la erección, hecho que impide la realización del acto sexual”.

La víctima, dice la fiscalía, “se desplomó” al segundo disparo, mientras la imputada “continuó disparando”.