Creó Radio Alegría para que sus alumnos la pudieran oír y se convirtió en docente del año 

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La tranquila tardecita de Rincón de Ramírez del pasado 3 de septiembre se llenó de gritos y bocinazos pasadas las 18 horas. Fue en el momento en que el ministro de Educación y Cultura, Pablo Da Silveira, anunció vía online que Marcia Hernández era la ganadora del Premio ReachingU al docente uruguayo 2020 por el proyecto Radio Alegría.

“Yo no podía entender qué era lo que pasaba hasta que vi que habían ido todos los padres con los niños en caravana para Rincón. Fue toda una sorpresa”, contó Marcia que, si bien el premio lo consiguió como maestra de la Escuela N°17 de Vergara, vive en un pueblo a 17 kilómetros de la localidad de Treinta y Tres en la que da clase.

Los que se acercaron hasta su casa fueron los protagonistas de Radio Alegría, un proyecto que surgió como respuesta a la suspensión de clases presenciales debido a la pandemia de la COVID-19, uno de los aspectos que la Fundación ReachingU valoró este año para entregar su premio anual.

A fines de marzo, con apenas una semana y media de declarada la emergencia sanitaria en Uruguay, los alumnos de Marcia ya se sentían un poco “huérfanos” en las clases vía plataforma. “Me decían que necesitaban escucharme. Estaban muy asustados, tenían miedos e inseguridades con esto de tener que estar en sus hogares”, recordó la maestra sobre las primeras inquietudes de los niños.

Marcia sintió que tenía que hacer algo y, de repente, una tarde se le ocurrió crear una radio online. Sin ninguna experiencia en la materia, durante todo un fin de semana se sumergió en internet buscando mucha información y tutoriales. Solo contaba con su laptop, la conexión a la red y un micrófono que le confeccionó su esposo, un profesor de biología que la vio tan entusiasmada con la idea que no dudó en ayudarla.

El domingo por la noche ya estaba pronta Radio Alegría, una emisora que aseguraba que de lunes a viernes, de 9 a 11 horas, los alumnos de los dos sextos años de la Escuela N°17 iban a tener su radioclase con todo lo que exige el programa lectivo. “En algunas ocasiones íbamos hasta las 12”, acotó Marcia.

Los alumnos la escuchaban desde cualquier dispositivo, como ser un celular, y participaban desde un foro que la docente agregaba día a día en la plataforma CREA. Quienes no podían hacerlo por la razón que fuere, le enviaban sus preguntas por WhatsApp y ella retransmitía los mensajes para todos.

“El vínculo con el maestro fue muy importante porque fue la forma de que ellos se sintieran seguros de que estaban aprendiendo a pesar de no estar yendo a la escuela y de que supieran que tenían un sostén emocional porque estaba su maestra”, destacó sobre el principal objetivo de su iniciativa.

Marcia no se quedó con las dos horas diarias de clase; quiso que Radio Alegría ofreciera una programación ininterrumpida que mantuviera motivados a sus alumnos. Los contenidos se lo proporcionaron los propios niños según sus gustos. “Me pedían chistes, audiocuentos, publicidad, música infantil elegida por ellos”, contó. Y agregó que los familiares también terminaron integrándose a las clases. “En un momento estaba la tía, el abuelo, la madre… todos escuchando y participando”, señaló.

Ella, a su vez, generaba actividades de acuerdo al estado de ánimo de los estudiantes, procurando siempre inyectarles optimismo en esos días de bajón propios del encierro obligado. “Hicimos de todo, hasta sorpresas para el Día de la Madre y del Padre”, detalló quien aún así seguía sintiendo que faltaba algo, que pasar a las familias un link frío con el contenido de la radio no era suficiente. Entonces creó un sitio web que vinculó con la emisora y, de a poco, fue fortaleciendo el proyecto.

Los resultados están a la vista y han sido tan exitosos que la maestra tiene decidido invertir el dinero del premio –US$ 5 mil- en transformar Radio Alegría en un proyecto institucional, que primero involucre a toda la escuela y luego a otras instituciones.

Considera que la nueva normalidad derivada de la pandemia determinará que ya no vuelvan algunas de las actividades que se relacionaban con las escuelas, pero sigue manteniéndose la necesidad de que “esté vinculada a la comunidad y que la comunidad siga aportando cosas a la escuela”, un ida y vuelta que en el interior del país es muy importante.

Esa es una de las razones por las que Radio Alegría se mantiene funcionando aunque haya vuelto la presencialidad.

“Una de las cosas que trato de fomentar y potenciar con mis alumnos es la importancia de estar vinculados, llegar con amor. Soy una docente de vocación y no lo digo porque esté de moda, sino porque realmente elegí hacer esto porque es lo que me gusta. Por eso siempre trato de superarme y afrontar las realidades que me toca con los pocos recursos que a veces tenemos los docentes”, remarcó.

Para Marcia todo es posible si hay amor y vocación de por medio y eso es lo que trata de transmitirle a sus colegas. “Siempre va a haber dificultades en la educación; las han enfrentado los docentes desde hace muchos años, las vamos a enfrentar nosotros y también las van a enfrentar las generaciones futuras. Lo importante es ponerle el corazón y lucharla porque se puede”, recalcó.

Añadió que en este contexto es fundamental el trabajo que realiza la Fundación ReachingU al valorar la labor docente, “algo a lo que en Uruguay no estamos muy acostumbrados”, lamentó. Pero no baja los brazos y sigue peleando por esa idea de transmitir que hay que persistir ante una dificultad.

“Creo que los docentes uruguayos tenemos herramientas para no quedarnos de brazos cruzados y afrontar los problemas y la realidad”, concluyó con orgullo quien por estos días es la protagonista de muchas notas de radio y no su promotora. “Es algo muy gracioso”, remató entre risas.