EDITORIAL
diario El País

El agua potable

Según el diccionario de la Real Academia (RAE), la vergüenza es una agitación del ánimo asociada a una acción que se considera deshonrosa.

Un ejemplo es el mentir. Sin embargo, sobran los dirigentes del F.A. a quienes dedicarse a esparcir falacias, se nota que no les provocan ninguna incomodidad. Al contrario, legisladores, jerarcas y dirigentes del Pit-Cnt falsean de continuo con pasmosa tranquilidad de “ánimo”, en contra del Presidente de la República. Ya sea despatarrados en un sillón si se encuentran en un programa televisivo ( la educación escasea) o frente a uno de los tantos micrófonos que les brinda con amplia generosidad el periodismo amigo. Y el otro también, no sea cosa que los tilden de oficialistas…

Así las cosas, la otra noche el senador (Pacha) Sánchez le enrostraba sin rubor alguno al gobierno, no hacer suficientes inversiones. Acusándolo de paso, de no aumentar el empleo. No solo obviaban lo que se está haciendo, sin ir más lejos en obras viales, en carreteras y puentes entre otras cosas, aparte de que cada vez que las autoridades anuncian una inversión, el Pit-Cnt y el F.A. se alza en voces y movimientos sindicales, paros y huelgas, para trabar cualquier reforma por imprescindible que sea ( Educación, Reforma de la Seguridad Social) o cualquier otro proyecto que las autoridades quieran llevar adelante, aun sabiendo que los atacarán sin descanso y que es muy difícil gobernar, dado el clima de oposición cerril, los relatos engañosos con los que machacan continuamente los opositores.

Ahora ha vuelto a estar en el tapete la planta de toma y potabilización de agua en Arazatí, San José, para mejorar el suministro a Montevideo y su zona metropolitana en caso de escasez del vital líquido. Para empezar, se trata de una de las varias inversiones, que de acuerdo a la información oficial, superará los US$ 200 millones y puede llegar a los US$ 500 millones si el directorio de OSE aprueba el nuevo plan de saneamiento para llevar agua a 60 pueblos. “Será la mayor inversión en esta área, en 150 años” destacó el presidente Lacalle Pou al informar sobre la aprobación del proyecto Neptuno. Aunque el Sr. Sánchez, (el que critica la falta de inversiones) y su gente estén abocados a frustrar la obra. La precariedad en que se encuentra hoy el sistema de agua potable es tan grande, que el otro día un técnico de una empresa israelí llegado a nuestro país, tras inspeccionar el estado de las tuberías, ☺-otro de los riesgos presentes- preguntó como los responsables “podían dormir tranquilos”. Lo contó el propio Ministro de Medio Ambiente, Adrián Peña. La inquietud subió varios grados, tras el crudo comentario.

El riesgo de que Montevideo y parte de Canelones queden sin agua corriente si el caudal hídrico se vuelve demasiado escaso, produce alarma. La obra en Arazatí es justamente, a fin de evitar un colapso.

Hace décadas que la usina de Aguas Corrientes de OSE, de donde sale el agua potable para el 60% de la población uruguaya, está en muy malas condiciones. Los lodos cargados de productos químicos; arsénico, bario, cadmio, cromo, cobre, mercurio, níquel, plomo, hierro y zinc, utilizados para potabilizar el agua han ido en aumento y la cantidad de residuos tóxicos que se depositan en esa parte del lecho del Santa Lucía es cada vez mayor. El riesgo de que Montevideo y parte de Canelones queden sin agua corriente si el caudal hídrico se vuelve demasiado escaso, produce alarma. La obra en Arazatí es justamente, a fin de evitar un colapso. El proyecto busca asegurar otra fuente, esta vez desde el Río de la Plata. Y más, con la corriente de “la niña” que nos tiene a mal traer dando vueltas en la región. Ante un posible exceso de salinidad en la corriente, algo que suele suceder unos 10 días al año, construirá un “polder” que asegure una buena reserva de agua dulce.

La oposición se muestra determinada a minar el esfuerzo de este gobierno que decidió no seguir en la anomia de los 15 años que caracterizó al F. A. en esta materia cuando estuvo en el poder. Y para colmo, con mayorías en las cámaras. Siendo así, es increíble que salgan a poner piedras como hace el vicepresidente del organismo por el Frente Amplio, Edgardo Ortuño, quien ojalá hubiese pontificado con la misma elocuencia que pone hoy para denostar la iniciativa oficial, en pos de que sus correligionarios tomaran cartas en el asunto. Los de FFOSE también sacuden el paño rojo que enfurece al toro, con advertencias tales como ¡quieren privatizar! Ortuño ya amenazó con una demanda ante el Tribunal de lo Contencioso (TCA) para pedir la nulidad del acto administrativo mediante el cual el directorio aprobó el proyecto. La licitación que anunció el Presidente será de pago por disponibilidad; OSE empezará a pagar a la empresa cuando la obra finalice, se calcula en unos dos años, pasando entonces a hacerse cargo del servicio.

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