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Seguridad Social


@|Se habla de la Reforma de la Seguridad Social. Todos están de acuerdo de que no se puede sostener más en el tiempo sin que se realicen cambios en su funcionamiento para darle sustentabilidad.

Los políticos saben que la estructura demográfica del Uruguay hace que los futuros jubilados, dentro de quince años, puedan decidir su voto en base a lo que perciban, que podría ocurrir cuando pasen a retiro.

Ahora, después que todos los sectores involucrados dieran sus opiniones a los técnicos que elaboraron el proyecto, se quejan de que los senadores lo aprobaron en solamente una semana. Y es obvio que algunos integrantes de la oposición, que han tenido cámaras y micrófonos a discreción por los denominados casos “Astesiano” y “Marset”, no vayan a disfrutarlo.

Volviendo a la reforma, la misma estaría unificando criterios jubilatorios y pensionarios desde un universo fraccionado y complejo.

Actualmente existe un importante número de activos y pasivos manejados por el “Banco de Previsión Social”; una entelequia creada para reunir las ex-cajas de Industria y Comercio, Rural y Civil, el Servicio de Retiros y Pensiones de las Fuerzas Armadas o “Caja Militar”, la Dirección Nacional de Asistencia y Seguridad Social Policial o “Caja Policial”, la Caja de Jubilaciones y Pensiones Bancarias, la Caja de Profesionales Universitarios y la Caja Notarial.

En la mayoría de los casos, los afiliados activos con sus aportes (propios o del empleador) eran los que sostenían los egresos hacia los afiliados pasivos.

Esta ecuación gradualmente se fue deteriorando, ya sea porque disminuyeron los aportes de los afiliados activos (menos aportantes, caída del poder adquisitivo, déficits presupuestales que bloquearon aportes patronales del Sector Público) y aumentaron los afiliados pasivos (facilidades para recibir una jubilación o pensión por razones políticas, mayor expectativa de vida). Y las sucesivas administraciones, blancas, coloradas y frenteamplistas tuvieron que aumentar la carga impositiva sobre la población para hacer frente a las erogaciones comprometidas por la Seguridad Social (7 puntos de los 22 del Impuesto al Valor Agregado, Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social, rápidamente instrumentado por el Cr. Danilo Astori luego que el IRPF que también creara sobre las jubilaciones y pensiones fuera declarado inconstitucional).

Existe una consabida resistencia por parte de la oposición a todo cambio que promueva el gobierno actual o cualquiera que no sea afín a su ideología.

Personalmente creo que no hay mejor sistema que aquel basado en el ahorro propio. No en el de colectivos donde las cuotas de esfuerzo y dedicación son desiguales y en algunos casos inexistentes. Para ellos, la sociedad tiene diversas formas de sostén, todas ellas basadas en las contribuciones del Sector Privado, motor de toda economía en desarrollo.

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