Felipe Paullier
Felipe Paullier

Cierre y balance

2021 ha sido un año muy particular, cargado de intensidad y emociones para todos. Llegando al cierre del mismo, es razonable hacer un balance de algunos de los principales hechos que se dieron en estos doce meses.

Parece lejano aquel comienzo de año, donde las restricciones y los cuidados sanitarios fueron la regla. Aún sin vacunas, vivimos en Uruguay entre diciembre del 2020 y abril de este año el momento más crítico de la pandemia.

Afortunadamente, nuestro país se enfrentó a dicha situación con un sistema de salud preparado, con suficientes camas, infraestructura y personal en CTI para enfrentar la ola de contagios. Eso permitió que, aún con altas tasas de contagio, nuestro sistema sanitario nunca se saturara.

En paralelo, los esfuerzos y negociaciones por conseguir vacunas en cantidad y calidad suficiente permitieron que nuestro país se colara entre las grandes potencias. Aunque no faltó la crítica oportunista en su momento, por no ser los primeros en la región en comenzar a vacunar, quedó demostrado que lo importante no era empezar sino culminar primero.

Hoy nuestro país alcanza una de las tasas de vacunación más altas globalmente, en particular respecto a población que haya recibido tercera dosis de refuerzo.

La prestigiosa revista The Economist publicó en estos días un ranking donde se evidenciaba que Uruguay era el segundo país más preparado del mundo para enfrentarse a la nueva variante omicron de covid-19.

Si hay un concepto que quedará en la memoria de todos después de estos meses, es el de la libertad responsable. Cuando las voces corporativas reinantes aclamaban el cierre total de las actividades, nuestro presidente con firmeza y convicción rechazó cuarentenas obligatorias.

Y más allá de lo marcado por las autoridades, esta visión fue abrazada por la sociedad en su conjunto. Con enorme responsabilidad, todos los uruguayos enfrentamos esta crisis sin precedentes para la humanidad poniendo nuestro granito de arena, inicialmente en el cuidado personal y colectivo, y más tarde al llegar las vacunas, poniendo el brazo.

El buen desempeño de nuestro país frente a la crisis sanitaria nos permitió una apertura relativa de la actividad económica en todo momento que, sumado a los incentivos para el empleo y los apoyos económicos para aquellos sectores más vulnerables implementados por el gobierno, permiten que en este 2021 la pobreza haya tenido un importante descenso en comparación con el 2020, en particular en la primera infancia.

El comienzo del próximo año, nos verá en un cruce de caminos con el referéndum sobre la Ley de Urgente Consideración propuesto por el Pit-Cnt y el Frente Amplio. 2022 empieza con una campaña electoral que constituye un desafío especial para la coalición de gobierno. En las antípodas del discurso propuesto por los impulsores del referéndum, al oficialismo le toca dar la batalla evitando la polarización y el enfrentamiento entre los uruguayos.

Frente a un horizonte que proyecta mayores certezas y bienestar para todos los uruguayos, sostener las reformas impulsadas por este gobierno y plasmadas en la LUC son una tarea imprescindible para seguir avanzando. ¡Adelante con fe!

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