Buenos Aires: marcha multitudinaria reclama al gobierno argentino mayor asistencia social

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Ayer jueves fue una jornada de caos en la ciudad de Buenos Aires. Decenas de miles de manifestantes, integrantes de organizaciones sociales y sindicatos, confluyeron en el centro de la capital argentina para reclamar al gobierno mayor asistencia a los comedores populares y aumento de subsidios en un país con una inflación que roza 60% anual.

Las agrupaciones que conforman la Unidad Piquetera marcharon en columnas que atravesaron toda la ciudad, hasta el ministerio de Desarrollo Social.

“Este es un país productor de alimentos, producimos para 400 millones de personas y acá somos 47 millones. No puede ser que haya familias que hoy no pueden poner un plato de comida digno en su mesa”, afirmó Silvia Saravia, coordinadora de la organización Barrios de Pie.

Según la dirigente, el ministerio de Desarrollo Social incumplió con su promesa de asistir mensualmente a los comedores populares y a mejorar la calidad y cantidad de alimentos. Saravia insistió en que “hay una situación gravísima, por el deterioro de los ingresos por la inflación. La inflación sobre los alimentos es superior a la inflación promedio”, advirtió. “Hay un plan de ajuste en marcha y la mayoría del pueblo lo estamos padeciendo”, aseguró.

En abril, el costo de vida de Argentina registró un aumento del 6% y se estima que será superior al 5% en mayo. Entre enero y abril la inflación acumulada fue de 23,1% y alcanzó 58% en los últimos 12 meses, mientras que el rubro alimentos y bebidas no alcohólicas mostró un alza de 62%.

Las organizaciones de izquierda reclaman un aumento de los montos de subsidio y de la ayuda financiera a los comedores populares y escolares que entrega el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner.

Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, afirmó que “la situación social se agrava a partir del ajuste y del acuerdo con el FMI que el gobierno ha firmado, estableciendo prioridades que no son las del pueblo argentino”.

Argentina alcanzó en marzo un nuevo acuerdo con el FMI por 45.000 millones de dólares para refinanciar un programa stand-by recibido en 2018 por el gobierno de Mauricio Macri.

La pobreza en Argentina es de 37%, según el estatal Instituto de Estadísticas. Un reciente informe de la organización religiosa Cáritas y de la Universidad Católica Argentina señaló que una de cada diez personas experimenta hambre de manera cotidiana en Argentina.

Fueron más de 25 las organizaciones de izquierda nucleadas en la Unidad Piquetera que se movilizaron ayer en Buenos Aires y se concentraron frente al Ministerio de Desarrollo Social.

En el marco de la protesta -que generó un caos vehicular en los ingresos a la Ciudad desde la provincia de Buenos Aires- los manifestantes se apostaron desde las 10 en los costados del Puente Pueyrredón; en la intersección de la avenida Rivadavia y la General Paz, en Liniers; y en inmediaciones de la avenida General Paz y avenida Libertador, en la ciudad de Vicente López.

Las columnas de manifestantes, que marcharon bajo el lema: “Por trabajo y por salario, contra el hambre y la pobreza”, confluyeron por la tarde en la cartera de Desarrollo Social, ubicada en Avenida 9 de Julio y Moreno.

Mientras las columnas se dirigían al Ministerio de Desarrollo Social, los manifestantes bloquearon la totalidad de los carriles de la Avenida 9 de Julio, cortando así el acceso al Metrobus.

“No vamos a acampar, pero acá tiene que haber una respuesta del gobierno. No puede ser que se mire para el otro lado, que el trabajo en la Argentina sea un milagro”, señaló Belliboni, en diálogo con TN.

Camino al Ministerio de Desarrollo Social, el dirigente apuntó contra el Gobierno por una disminución del 50% de las comidas que son entregadas a los comedores populares. “Queremos un paro y un plan de lucha como le pedimos a la CGT”, sentenció Belliboni. “Que no se ahorren la plata de los comedores populares”, agregó el dirigente.

En el caso del Puente Pueyrredón, desde temprano efectivos de Prefectura Nacional custodiaban la subida en sentido al centro desde Avenida Mitre. Cuando faltaban 10 minutos para el mediodía, los manifestantes quedaron cara a cara con los prefectos ante una supuesta orden de no dejarlos subir a pie al puente. Tanto desde Irigoyen como desde Mitre decenas de hombres y mujeres quedaron enfrentados con los uniformados.

Tras algunos empujones, gritos y varios forcejeos, los piqueteros, al mando de Belliboni, tomaron el control de la vía de acceso entre la ciudad y Avellaneda. Ambas manos estuvieron cortadas al tránsito por varios minutos.

“Es una marcha política, parte de un plan de lucha que vienen desarrollando desde hace unos meses grupos sociales vinculados a partidos políticos de izquierda”, indicaron a Télam fuentes oficiales. Desde el Ministerio de Desarrollo Social aseguraron que existe “un diálogo permanente con las organizaciones sociales, las iglesias y las ONG para resolver las situaciones sociales que se encuentran pendientes”.

Ayer, tras un encuentro con dirigentes del secretariado de la CGT y de la CTA Autónoma, las organizaciones sociales ratificaron el nuevo “plan de lucha” que se reflejó ayer en las movilizaciones al centro de la ciudad de Buenos Aires. El sector afirma que “la caída de los ingresos fijos, de salarios, jubilaciones y programas sociales es innegable, (y que) la inflación en alimentos superó en el primer cuatrimestre el 30%, dejando a millones en la pobreza y la indigencia”.

Según el último informe de la consultora Diagnóstico Político sobre cortes en la vía pública, la cantidad de piquetes registrados en lo que va de 2022 asciende a 2.592 en todo el país, una suba del 73% con relación al primer cuatrimestre del año pasado. El año 2021 concluyó con un total de 6.658 cortes, el número más alto desde 2014. (AFP, La Nación/GDA)