Gobierno dará constancias para que cubanos puedan trabajar mientras tramitan refugio

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Este mediodía, decenas de personas de nacionalidad cubana que intentan regularizar su situación en Uruguay protestaron bloqueando el ingreso al centro de atención del Ministerio de Relaciones Exteriores, sobre la calle Cuareim. Al lugar arribó personal del Ministerio del Interior y, luego de la intervención de los negociadores, los inmigrantes pudieron conversar con autoridades de la Cancillería.

La directora de Derechos Humanos del Ministerio de Relaciones Exteriores, Dianela Pi, dijo en rueda prensa que las personas que se encontraban fuera del edificio "son personas que están utilizando el procedimiento de refugio porque es la manera de que puedan ingresar al país sin la visa. De esa manera, en la frontera presentan la solicitud de refugio, esa solicitud viene a Cancillería y se les da una constancia".

"Con el mismo personal con que se estaban tramitando menos de 200 solicitudes de refugio por año, el año pasado tuvimos que tramitar alrededor de 1.770 y este año ya vamos por el entorno de las 5.000. Obviamente, ha colapsado la capacidad", relató.

Por este motivo, se resolvió aplicar un "plan de contingencia" que consiste en que "una vez por semana vamos a estar entregando constancias para los solicitantes de refugio y se estableció un plan que permite que de aquí a fin de año, podamos tramitar todas las constancias de solicitud de refugio, que es lo que le permite a la persona iniciar el trámite para obtener una cédula de identidad" que será "igual a la de cualquier uruguayo", permitiendo "que la persona pueda acceder a todo tipo de derechos y servicios sin ningún tipo de discriminación".

El director de Asuntos Consulares y Vinculares, Jorge Muiño, contó que en la reunión que se llevó a cabo con ciudadanos cubanos se enteraron que "los empleadores les han dicho que no querían tomarlos porque no tenían la cédula de identidad". Por este motivo, "se resolvió que a aquellos que estén en proceso de regularización se les puede extender una constancia a los efectos de decirle al empleador que en tal fecha tiene que asistir a la Cancillería, a la Dirección de Migraciones o a una oficina consular para regularizar su situación migratoria" y que el empleador "pueda inscribirlos con pasaporte".

El plan comenzará a aplicarse el jueves 1° de noviembre con los cubanos que llegaron en calidad de refugiados en el mes de mayo.

Muiño manifestó que Uruguay tiene una política migratoria de "puertas abiertas" y que "profesa una migración regular, ordenada y segura", por lo que se va a intentar "regularizar lo más rápido posible a la población migrante".

"Nos alegramos de que hoy (los inmigrantes cubano) hayan querido conversar y negociar, porque hasta ahora no querían venir a plantearnos la situación que tenían, lo cual hacía muy difícil que pudiéramos resolverla", comentó Pi.

Muiño señaló que, según la Dirección Nacional de Migraciones, este año ingresaron a Uruguay 8.700 ciudadanos cubanos, pero 3.700 han salido.

Luis Ricardo, un cubano de 31 años que llegó a Uruguay a principios de octubre, explicó que el principal problema que surgió en los últimos días es que, debido a la ola migratoria, los cubanos que iniciaban los trámites para obtener un permiso de trabajo o la cédula de identidad recibían fecha para mediados de 2019, lo que les impedía obtener un empleo. "A mí me habían dado fecha para el 31 de julio (de 2019), ahora tengo fecha para el 14 de diciembre", ejemplificó, y dijo que "agradece profundamente" la medida de Cancillería.

"Estoy muy agradecido con todos los uruguayos, son muy buenas personas y se nos trata muy bien", dijo, y pidió "disculpas a todos los uruguayos" por lo ocurrido hoy, ya que "estamos viviendo una situación muy precaria, donde nos vemos sin dinero ni posibilidades de trabajar, que es lo que nos da chances de poder sostenernos".

"Yo ahora puedo optar por un trabajo" hasta que se regularice su situación, explicó alegre.