Maciel: “Se rompió con la resignación del ‘no se podía con la inseguridad’, demostrando que se puede"

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El pasado domingo 10 de enero el Ministerio del Interior divulgó los datos de los delitos en los primeros 10 meses de gestión del gobierno presidido por Luis Lacalle Pou.

El informe, realizado por el Observatorio Nacional sobre Violencia y Criminalidad de la cartera, mostró un descenso de homicidios, denuncias por rapiña, hurtos, violencia doméstica y abigeato en comparación con el mismo período de 2019.

En diálogo con El País, el subsecretario del ministerio, Guillermo Maciel, analizó los factores que, a su juicio, fueron fundamentales para la baja de los delitos.

Maciel sostuvo que “más allá de las enormes dificultades surgidas por la imprevista pandemia” se viene gestando un cambio en materia de seguridad pública.

Para el jerarca hubo “tres quiebres importantes” que fueron clave en el descenso. Estos, dijo, fueron “el de la tendencia o curva ascendente, que ahora pasó a ser a la baja; el de la impunidad, aclarando más delitos y con más personas formalizadas; y el de la resignación, del ‘no se podía con la inseguridad’, demostrando que se puede”.

El subsecretario de la cartera sostuvo que “por primera vez en 15 años hay bajas significativas de los delitos”. Y apuntó que al comparar el período del 1° de marzo hasta el 31 de diciembre de 2020 con el mismo lapso pero de 2019, hubo “70 homicidios menos, 2.700 denuncias menos por rapiñas y 22.300 menos denuncias por hurtos”.

Según explicó Maciel, la caída de los delitos durante la gestión de Jorge Larrañaga al frente de la cartera son “datos auspiciosos que indican que el rumbo es el correcto”. No obstante, indicó que estos resultados se toman con cautela por parte del Ministerio del Interior.

“Hay que mejorar más. Y con la premisa de: ni un minuto de tregua al delito, trabajando con la obsesión de mejorarle la vida a la gente y recuperar la seguridad perdida”, subrayó.

Consultado sobre cuáles fueron a su entender los motivos de la baja de los delitos durante los 10 meses de gestión de las nuevas autoridades, Maciel lo atribuyó a diferentes factores. El subsecretario destacó “el trabajo, esfuerzo, dedicación y compromiso diario y persistente de la Policía Nacional”. En ese sentido dijo que el primer día que asumieron Luis Lacalle Pou como presidente y Jorge Larrañaga como jefe de la cartera de seguridad, se llevó a cabo una reunión en Torre Ejecutiva donde las nuevas autoridades les brindaron respaldo a los mandos policiales.

“Tenemos la misma Policía, pero con una distinta conducción y gestión. Hoy hay directivas claras, planificación, despliegue, protocolos, autoridad y voluntad política y todo eso es crucial en el descenso de los delitos”, ejemplificó.

Maciel también destacó la reapertura de más de 40 destacamentos policiales a lo largo de todo el territorio, la descentralización del PADO y la creación de una Brigada Departamental de Droga en Montevideo y Canelones. En relación con esto último, el jerarca puntualizó que durante 2020 se realizaron 900 allanamientos más que en 2019 y hubo un 58% más de bocas de venta de droga cerradas.

“La puesta en vigencia de la LUC da un mayor respaldo a la Policía y proporciona instrumentos para el más eficaz combate al delito”, aseguró. Por último, destacó que también se logró una “mayor y mejor coordinación” entre el Ministerio del Interior, la Fiscalía y la Justicia.