HOGAR

¿Cuál es la manera correcta de guardar los huevos? ¿Cuándo ponerlos en la heladera?

Es común encontrarlos en los puntos de venta a temperatura ambiente. Al llegar a casa, muchas personas los guardan en la misma temperatura, otras prefieren refrigerarlos.

huevos en la heladera
Foto: Freepik

El huevo de gallina es un alimento que bien podemos usar en cualquiera de las cuatro comidas. Es rico en proteínas de calidad, así como de biotina, rivoflavina, vitaminas A, B2, Biotina, B12, D, E, y K; así como rico en minerales en donde encontramos fósforo, selenio, hierro, yodo y zinc.

Según Mayo Clinic, también tiene naturalmente un alto contenido de colesterol que, sin embargo, no parece elevar nuestros niveles de colesterol como lo hacen otros alimentos con alto contenido de grasas trans y grasas saturadas. 

Por otro lado, según nuestra columnista Lorena Balerio, especialista en nutrición, el huevo también es un alimento a incorporar a tu día si estás buscando alimentarte de manera moderada y bajar de peso, ya que favorece la sensación de saciedad. 

¿A temperatura ambiente o en refrigeración?

En Uruguay y muchos países de la región es común encontrarlo en los puntos de venta en mostradores a temperatura ambiente. Y, al llegar a casa, de igual manera, solo acomodar las piezas en algún espacio de la cocina o alacena.

De hecho, cuando llegamos a casa, lo más aconsejable es dejar los huevos en temperatura ambiente, ya que si los metemos al refrigerador podemos ocasionar un choque de temperatura y una condensación de líquidos. Esto, puede causar que el huevo sude hacia afuera y que por sus poros entren los microorganismos que estaban en la superficie de la cáscara.

¿En qué casos se mete al refrigerador?

Cuando el huevo se pasteuriza es necesario conservarlo en un ambiente frío. Es como si tuvieras un litro de leche, si no lo mantenés en el refrigerador, lo más seguro es que tenga proliferación de bacterias y se eche a perder.

huevas a la heladera
Foto: Freepik

Recordemos que la pasteurización es un método de choque de temperaturas para matar cualquier microorganismo que pueda afectar nuestra salud. Es una práctica comín en lácteos y en conservas. El alimento se somete a una temperatura entre los 60°C y los 80°C por un corto periodo de tiempo para después ser enfriado de manera inmediata y así bajar su temperatura.

Un huevo pasteurizado tiene una vida en el refrigerador más larga que uno conservado a temperatura ambiente y sin pasteurizar. Podés conservarlo entre tres a cinco semanas.

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