ENTREVISTA

Brenda Gandini: “Tenemos el proyecto de vivir un tiempito en Uruguay”

La actriz argentina es parte de "Desnudos", la comedia que este fin de semana hará cinco funciones en Teatro Metro. De eso charló con El País.

Brenda Gandini. Foto: Mauro V. Rizzi / La Nación
Brenda Gandini. Foto: Mauro V. Rizzi / La Nación

El de mañana podría ser su debut en un escenario uruguayo. Brenda Gandini tiene la impresión de que alguna vez llegó a Montevideo como integrante del elenco de Floricienta, uno de los grandes fenómenos juveniles de Cris Morena, pero esos eran tiempos de gira a lo rockstar y los recuerdos, hoy, son difusos.

Entonces el de mañana, de la mano de la comedia Desnudos, podría ser un debut. La obra teatral, un éxito sostenido del último año y medio, hará cinco funciones este fin de semana en el Teatro Metro: tres serán el sábado y dos el domingo, y quedan las últimas entradas en Redtickets. Con Gandini están su pareja Gonzalo Heredia, además de Luciano Cáceres, Esteban Lamothe, Mercedes Scápola y Sabrina Rojas.

“Pero he ido mucho a Uruguay porque bueno, he tenido novio uruguayo en su momento”, comenta entre risas en charlas con El País. Dice que veraneó durante años en Punta del Este, donde su madre, la modelo Daniela Cardone, tenía apartamento; que tiene amigos en Montevideo y que en 2019 acompañó a Heredia, que además de actuar es escritor, a participar de la Feria del Libro local.

“Y amamos”, confiesa. “La verdad es que tenemos el proyecto de vivir un tiempito en Uruguay, así que espero que me acepten (se ríe). Nos encanta, nos gusta mucho, nos gustaría un tiempo; ir y venir, porque estamos tan cerca que parecemos un mismo país”.

Por lo pronto, Gandini llega para trabajar, y de eso y su carrera como actriz charló con El País.

—En lo personal, ¿qué es lo que más destacás de esta experiencia con Desnudos?

—Primero, poder viajar y conocer lugares que individualmente no lo podría hacer en un año. Segundo, me gusta compartir esto con Gonzalo, mis amigos que son todos los de la obra, vivirlo con mi familia porque también es una experiencia nueva para nosotros; y sobre todo que la gente nos vea haciendo otra cosa, en otro registro. Después por las redes es como recibir amor constante, y es muy gratificante. Para mí hacer una buena obra significa eso: que la gente se ría y se vaya con un mensaje, pensando. Porque Desnudos abarca la complejidad de las relaciones. Ves el cartel y pensás que son seis personajes que están arriba del escenario de forma desnuda, pero la obra de lo que habla es de desnudarse en sus miserias, y encontrándose en lo que está sucediendo en sus relaciones. Yo creo que las obras de teatro deberían ensayarse de dos años a tres (se ríe), porque a medida que la vas haciendo vas descubriendo qué quiso decir el autor.

El elenco de "Desnudos", con Gandini, Lamothe, Scapola, Cáceres, Heredia y Rojas. Foto: Difusión
El elenco de "Desnudos", con Gandini, Lamothe, Scapola, Cáceres, Heredia y Rojas. Foto: Difusión

—¿Sentís que hay algo que cambió, quizás un tabú que se rompió en relación al público y el cuerpo?

—Sí, creo que sí. También lo rompí yo, porque no tenía este pensamiento antes. Las nuevas generaciones tienen otra cabeza completamente distinta y lo celebro, y lo que más me pasa con mis hijos (Eloy de 11, Alfonsina de 5) es la relación que tienen con sus cuerpos y el rol que tenemos nosotros en esa relación. Se está rompiendo ese tabú, aunque todavía hay algún tema de: “Uh, mirá, ¡mostró una teta!”. Y cada uno con su cuerpo hace lo que le da la gana. Yo siento que mi cuerpo es mi instrumento de trabajo, y no le puedo poner esa carga que se le pone habitualmente. Y celebro que las nuevas generaciones estén rompiendo ese tabú.

—Antes hablaste de compartir Desnudos como familia, ya que acá están Gonzalo y vos girando los dos juntos. ¿Qué implicó eso para su dispositivo?

—Mucho (se ríe). Tenemos una estructura familiar y de niñeras que tenemos que dejar, porque a algunos viajes los podemos llevar pero a otros no, porque son muchos días. Tratamos de organizarnos bastante y de disfrutar esta etapa de novios que nos toca, porque uno cuando tiene hijos son muy pocos los momentos así que puede tener. Así que estamos encontrándonos y disfrutando de eso.

—La gente está más acostumbrada, probablemente, a verte en televisión o en la pantalla. ¿Qué te da el escenario de teatro?

—Para mí el teatro es lo más complejo de hacer, de llegar, porque siento que es donde más tengo que sacar a mi actriz . Son distintos registros, el cine tiene que ser más chiquitito, el teatro más exagerado, y es más agotador físicamente. Y está esto de romper la cuarta pared, porque hay espectadores que interactúan y te modifican la forma de actuar. Es algo que está vivo; requiere mucha más concentración y energía.

—¿Y qué te dejó empezar tu carrera de actriz a ese nivel tan alto como fue el de Floricienta? ¿De qué manera sentís que te curtió para lo que iba a venir?

—Para todo aspecto. Siento que no fui consciente de lo que estaba viviendo en ese momento, por suerte. De un momento a otro me puse a estudiar canto, actuación, baile, y en tres meses estaba en un escenario ante 20.000 personas. Fue como una escuela intensiva para mostrarme el camino, porque no tenía desarrollado el ser actriz desde chica. Yo me vine a Buenos Aires a estudiar Administración de Empresas y después Diseño de indumentaria, y terminé siendo actriz y descubriendo que era mi verdadera pasión. Me encanta contar historias, desafiarme a mí en cada trabajo y conocerme desde otro aspecto. Entonces Floricienta fue un intensivo para prepararme para lo que venía, porque después nunca paré de trabajar. Igual ahora veo los proyectos y pienso que me hubiera gustado estar más preparada, pero ahí entra la crítica de uno, constante. Hoy ya no tanto, hoy pongo el foco en disfrutar, en ser consciente y agradecida de estar en el lugar en que estoy, ya sin demostrar un querer ser la mejor. Es mucha exigencia, ¿y quién determina qué es lo mejor? Está bueno poner el foco en disfrutar y en hacerlo lo mejor que se pueda.

—¿Desde ese lugar es desde el que te estás vinculando con Desnudos, que a otra escala también es un fenómeno?

—Sí. Estamos muy sorprendidos y contentos, siendo conscientes de eso. En Buenos Aires hay una oferta teatral impresionante, y que la gente haya elegido Desnudos, que las devoluciones sean tan hermosas, te motiva a querer seguir. Hacer una comedia depende de la reacción del público, y estamos abiertos y predispuestos a esa posibilidad. Nosotros no pensamos, cuando hicimos la obra, que íbamos a seguir tanto tiempo. Eso se dio por la gente, y no hubiera podido ser de otra manera.

Reportar error
Enviado
Error
Reportar error
Temas relacionados